La Comisión Europea ha propuesto
conceder a España 1 019 184 euros del Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización (FEAG)
para ayudar a encontrar un nuevo empleo a 300 trabajadores despedidos del
sector textil en la
Comunidad Valenciana. La propuesta se envía ahora al
Parlamento Europeo y al Consejo de Ministros de la UE para su aprobación.
László Andor, Comisario europeo de
Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión, ha declarado:
«El millón de euros del
Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización que la Comisión ha propuesto
demuestra la solidaridad de la UE
con quienes han perdido su trabajo como consecuencia de la crisis económica y
financiera. La situación del empleo en la Comunidad Valenciana
es motivo de gran preocupación, pero la región ha aprovechado bien las
oportunidades ofrecidas por el FEAG, como vi cuando visité Valencia en marzo de
este año. Confío en que las medidas concretas propuestas hoy ayudarán a los
trabajadores despedidos a encontrar nuevos puestos de trabajo adecuados.»
España solicitó la ayuda del FEAG a
raíz de que 142 fabricantes de productos metálicos de la Comunidad Valenciana
despidieran a trabajadores como consecuencia de la crisis económica y
financiera. El sector de los productos metálicos fabricados es un proveedor
clave de insumos para una amplia serie de actividades manufactureras, en
particular para los sectores de la construcción naval, de la construcción y del
automóvil. Todos ellos se han visto muy afectados en toda la UE por la crisis económica.
Las medidas cofinanciadas por el FEAG
pueden ayudar a los 300 trabajadores con mayores dificultades para encontrar un
nuevo empleo, ofreciéndoles, de forma intensiva, ayuda en la búsqueda de
empleo, asesoramiento y orientación, formación general y reciclaje, formación
profesional, fomento del emprendimiento y una serie de ayudas e incentivos.
El total estimado del conjunto de la
ayuda asciende a 1,7 millones de euros, de los que el FEAG aportará un
60 %.
Antecedentes
Entre los años 2000 y 2007, es decir,
antes de la crisis económica y financiera, el crecimiento medio anual del
índice de producción industrial en la
Europa de los 28 fue del 1,7 % aproximadamente; en el
primer trimestre de 2008, el índice alcanzó su nivel máximo (112,8). Entre
abril de 2008 y abril de 2009, la producción industrial en la Europa de los 28 se redujo
más de 22 puntos porcentuales. Sin embargo, posteriormente, durante cerca de 2
años se produjo una recuperación relativamente dinámica. A partir de mayo de
2011, la producción industrial volvió a disminuir. El índice medio de
producción industrial de la UE
en 2013 es comparable al de 2003.
En España, el índice medio de
crecimiento anual de la producción industrial siguió la misma tendencia que en la Europa de los 28 hasta
2007. Sin embargo, entre abril de 2008 y abril de 2009, la producción
industrial en España se redujo casi 27 puntos porcentuales (5 puntos más que en
el caso de la Europa
de los 28). Desde entonces, la producción industrial no se ha recuperado y se
ha producido una disminución relativamente constante. El índice medio de
producción industrial de España en 2013 es comparable al de 1994.
El descenso de la producción en la
industria tuvo consecuencias en el empleo. España perdió casi 600 600
empleos en la industria entre 2008 y 2012, 150 000 de ellos en el sector
de los productos metálicos manufacturados. Estas pérdidas de empleo
representan, respectivamente, el 24 % del total del empleo en la industria
y el 35 % del total del empleo en el sector del metal.
A principios de este año, la Comisión propuso dedicar
recursos del FEAG para ayudar a los trabajadores del sector textil despedidos
en la misma región (IP/14/81). La
región ya recibió apoyo del FEAG por otros 7 casos de despidos masivos en la
fabricación de materiales de construcción (IP/13/835),
el sector de la construcción (IP/12/616, IP/12/137 IP/10/543),
la industria del calzado (IP/12/448) y los
sectores textil y de la piedra.
Un comercio más abierto con el resto
del mundo aporta crecimiento y empleo, pero también puede costar la pérdida de
algunos puestos de trabajo, sobre todo de trabajadores menos cualificados en
sectores vulnerables. Por esta razón, el señor Barroso, Presidente de la Comisión, propuso
inicialmente la creación de un fondo para ayudar a quienes tienen que adaptarse
a las consecuencias de la globalización. Desde que empezó a funcionar en 2007,
el FEAG ha recibido 128 solicitudes. Se han solicitado alrededor de 523
millones de euros para ayudar a más de 111 000 trabajadores. Cada vez más
Estados miembros presentan solicitudes de ayuda del FEAG para trabajadores
despedidos en un número creciente de sectores. Solo en 2013, el FEAG
proporcionó más de 53,5 millones de euros en ayudas.
En junio de 2009 se revisaron las
normas del FEAG para reforzar su papel como instrumento de intervención precoz
en el marco de la respuesta de Europa a la crisis financiera y económica. El
Reglamento revisado del FEAG entró en vigor el 2 de julio de 2009 y el criterio
de la crisis se aplicó a todas las solicitudes recibidas entre el 1 de mayo de
2009 y el 30 de diciembre de 2011.
Gracias a esta experiencia y al valor
añadido del FEAG para los trabajadores beneficiarios y las regiones afectadas,
el Fondo continúa siendo durante el período 2014-2020 una expresión de la
solidaridad de la UE,
con nuevas mejoras en su funcionamiento. Su ámbito de aplicación se ha ampliado
para incluir de nuevo a los trabajadores despedidos a causa de la crisis
económica, así como a los trabajadores con contratos temporales, los
trabajadores autónomos y, a modo de excepción hasta finales de 2017, los
jóvenes que ni estudian ni trabajan en las regiones con una elevada tasa de
desempleo juvenil.